El presidente en funciones, Pedro Sánchez, y el líder de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, han llegado a un preacuerdo para formar juntos un gobierno de coalición que desbloquee la situación política, sin vetos y cuyos términos concretos y composición se irán cerrando en las próximas horas.
Los nuevos comicios podrían desbloquear una situación que se prolonga desde abril. Aún con el pacto cerrado entre PSOE y Podemos todavía sería necesario recabar el apoyo de otras fuerzas políticas.
Ambas fuerzas de izquierda suman 155 escaños, 21 por debajo de la mayoría absoluta. Podrían contar a priori con los 7 del PNV, los 3 del Más País y el único del Partido Regionalista de Cantabria. Pero aún le faltarían otros diez apoyos para sacar adelante la investidura de Sánchez. Estos podrían venir de Esquerra o, incluso, de Ciudadanos.
Las negociaciones entre PSOE y Unidas Podemos se rompieron horas antes de la fallida investidura de julio. Entonces, Sánchez ofreció a Podemos una vicepresidencia y los ministerios de Sanidad, Vivienda e Igualdad. Iglesias rechazó la propuesta al considerar que las carteras estaban vacías de competencias.